En el artículo anterior titulado, “Tipos de archivos adjuntos, ¿amigos o enemigos?” revisamos la importancia de reconocer cuándo estamos ante un archivo de este tipo.
También aprendimos algunos pasos a seguir a la hora de administrar determinados tipos de archivos adjuntos.
Sin embargo, sigue quedando un tema importante en el tintero: ¿qué medidas de seguridad seguir cuando abrimos un archivo adjunto?
Y este será el tema que trabajarán nuestros expertos en el blog de Hospedalia en esta ocasión.
¡Disfruta de tu lectura!
Descargando y abriendo archivos adjuntos de manera segura
Una vez que identificas un archivo adjunto seguro, es importante descargarlo y abrirlo de manera segura.
Para ello, haz clic en guardar y escanéalo con tu antivirus.
En el momento siguiente, se deberá mostrar un cuadro de diálogo notificando si está libre de virus o no.
Siempre usa programas originales descargados de fuentes seguras
Evita hacer clic en enlaces sospechosos o botones que te insten a descargar un archivo sin precaución.
En su lugar, utiliza las opciones de descarga de tu cliente de correo electrónico y guárdalo en una ubicación que puedas verificar fácilmente.
No obstante, antes de dar este paso, te sugerimos te asegures de que tu software de seguridad esté actualizado. Así como también realizar un escaneo de virus para potenciar la seguridad.
Detectando mensajes de correo electrónico sospechosos
No todos los archivos adjuntos maliciosos son obvios. Los ciberdelincuentes a menudo utilizan tácticas sofisticadas para engañarte.
Aprende a detectar mensajes de correo electrónico sospechosos. Fíjate en los errores gramaticales y ortográficos, verifica el remitente y evita hacer clic en enlaces o descargar archivos adjuntos si tienes alguna duda.
¿Te interesa ampliar esta información? Entonces te invitamos a revisar este artículo “Detectando enlaces de phishing y protegiendo tus datos en línea”. En él encontrarás información muy útil así como una interesante infografía.
Además, para detectar archivos adjuntos de origen sospechoso, te recordamos nunca compartir información confidencial a través de él.
Normalmente los correos maliciosos contienen frases a la acción como “Clic en el botón”, “Haz clic en el siguiente enlace para descargar tu factura”, “Abre el adjunto para disfrutar tu premio”, entre muchas otras.
Conclusión. Protege tu correo y tus datos
En la era digital, la seguridad es fundamental. No permitas que el miedo a los archivos adjuntos maliciosos te impida aprovechar al máximo tu correo electrónico.
Con los consejos que te hemos proporcionado, puedes enfrentar la incertidumbre con confianza.
Aprende a reconocer los archivos seguros, descárgalos y ábrelos de manera responsable, y mantente alerta ante posibles amenazas.
Tu seguridad en línea y tus datos personales son valiosos, así que protege lo que más importa.
Administrar archivos adjuntos de manera segura es un paso crucial para una experiencia de correo electrónico sin preocupaciones. Con estos consejos, puedes mantener la puerta cerrada a las amenazas cibernéticas y abrir la puerta a la tranquilidad.
¡No permitas que el miedo te detenga!
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